Desde el Enredando las Mañanas nos comunicamos telefónicamente con  Aisha, estudiante de la Universidad Nacional de Córdoba y una de las integrantes de la Asamblea Interfacultades que sostiene desde hace un mes la toma del Pabellón Argentina, sede del Rectorado. Esta toma, nacida al calor de la defensa de la educación pública, busca avanzar en un petitorio con una serie de reclamos recibiendo todo tipo de agresiones y manipulaciones mediáticas como presión para que levanten la medida sin obtener ninguna respuesta por parte de las autoridades.

Para empezar, Aisha detalló las distintas situaciones atravesadas durante la última semana. “Lo más grave que sucedió -señala- fue el jueves, que en el medio de una convocatoria a mesa de diálogo, por parte de las autoridades, se dio un atropello muy fuerte a todxs lxs estudiantes que estamos en el Pabellón”. La estudiante se refiere a un violento ataque sufrido por parte de integrantes de la agrupación estudiantil Franja Morada y de la Gremial San Martín, que agrupa a trabajadorxs no docentes de la UNC.

“Veníamos -continúa Aisha- de una noche en la que la policía había liberado la zona permitiendo que una persona particular viniera a violentarnos, a romper 2 puertas y 8 ventanas, tenemos grabaciones de cómo la policía se quedaba mirando desde la vereda del frente cómo este hombre rompía el Pabellón y no hacían nada (…) A la mañana siguiente, en el medio de esta instancia de diálogo a la que nosotros asistimos con la mayor predisposición, se dio esta situación de violencia que fue llevado a cabo principalmente por la Franja Morada y la Gremial San Martín, tenemos identificados a estudiantes, profesores y no docentes que participan de estas agrupaciones. En general fueron compañeras las que recibieron golpes en la cara, en el cuerpo, tardaron como cinco días en recuperarse, les tiraron gas pimienta en la cara, una situación muy deplorable. Y lo peor es que mientras eso estaba sucediendo, el presidente de la FUC, ‎Samir Mohuanna, llamaba a una asamblea completamente ilegítima que la misma secretaría general de la FUC desconoció (…) en ese momento vino  [el rector] Yanzi a decir que él no se responsabilizaba de la violencia que estaba pasando, nosotros lo increpamos y le preguntamos frente a los medios si él defendía o no lo que estaba pasando, esta forma de agresión y no respondió nada”.

El conflicto se ha agudizado con el paso de las semanas y la integrante de la Asamblea sostiene que hoy “hay cuestiones de poder que se están dirimiendo que realmente está cambiando el panorama político de la Universidad”.  Pero además, plantea que junto a la violencia física hay una violencia simbólica que no están dispuestxs a aceptar y que es lo que define como un “juego falso”, esta “puesta en escena de una mesa de diálogo que no es tal y de la que no surge ninguna voluntad de acordar nada, de charlar nada, porque en todo caso nosotros también somos estudiantes que habitamos la universidad y que tenemos todo el derecho del mundo a exigir que se consideren nuestros reclamos y que se considere el tipo de Universidad que nosotros queremos construir también. Estas personas no solamente hacen una puesta en escena para los medios en la que supuestamente dialogan, sino que nos tratan de antidemocráticos”.

 

Propuesta y contrapropuesta

En el marco de la mesa de negociación anunciada por el Rectorado el pasado 13 de septiembre y disuelta unilateralmente el pasado lunes por las mismas autoridades, se presentó a la Asamblea Interclaustros una propuesta que la estudiante no duda en calificar de “absurda, carente de cualquier tipo de seguridad o de certeza a largo plazo, no resolutiva (…) para el lunes a las 12, si nosotros levantábamos la toma. Ante esa burla que recibimos por parte de las autoridades, hicimos una contrapropuesta bien exhaustiva y específica, en la que  pedíamos que el Consejo Superior avalara a estas cinco autoridades que forman esta Comisión de Diálogo para que pudieran revisar nuestra contrapropuesta metodológica del pliego”. Ante esto, lxs estudiantes denuncian que el Rector llegó una hora tarde y, sin dirigirse a los voceros de la Asamblea presentes, se dirigió directamente a los medios para leer una carta donde anunciaba la disolución de la mesa de diálogo”.

La contrapropuesta elaborada por la Asamblea, explica Aisha, contemplaba la conformación de cinco comisiones de trabajo para trabajar diferentes puntos del pliego con el fin de generar en un plazo de 30 días, proyectos a ser tratados en el Consejo Superior, órgano superior de gobierno de la Universidad.

 

Primer Encuentro Provincial en Defensa de la Educación Pública

La actividad desplegada en el marco de las tomas es realmente sorprendente. Desde el colectivo (conformado en su mayoría por estudiantes que no se identifican con un partido político o agrupación específica) se generan cotidianamente talleres, conversatorios, varietés con música y artistas, cines debate, ollas populares.

Una de las iniciativas desarrollada el pasado fin de semana fue el Primer Encuentro Provincial en Defensa de la Educación Pública, al que asistieron estudiantes de las Universidades de Rio IV y Villa María, de la Universidad Provincial y de algunos colegios secundarios e instituciones terciarias de Córdoba. En él se abordaron una diversidad de temas, explica Aisha, “que tienen que ver con la reforma académica, con el recorte de incumbencias, también con todos los recortes que  estuvo habiendo en la educación en general, con los planes Conectar Igualdad, con todo lo del incentivo docente, explicar un poco la situación política y el panorama del ajuste en educación y en el sector estatal en general (…) Se dio la situación de poner en común planes de lucha a largo plazo y ahora estamos proyectando un encuentro nacional interuniversitario para octubre, si es que funciona”.

A su vez, y en consonancia con el paro nacional convocado por las centrales obreras este 24 y 25 de septiembre, organizaron “el lunes mismo una olla popular donde vinieron también varios sindicatos a conversar con nosotros y el martes a las 6 de la mañana un piquete”. A contramano del discurso que quieren instalar desde los medios hegemónicos, lxs estudiantes sostienen que no están derrotadxs  ni aisladxs y que “lo más que hacemos es salir para afuera habitar las calles y seguir luchando”. En igual sentido se dio la participación en el Primer Encuentro del Sindicalismo Combativo desarrollado este fin de semana.

 

Los puntos del pliego

El pliego de reclamos construido colectivamente por la Asamblea Interfacultades incluye distintos aspectos de la vida universitaria. Aisha señala, en primer lugar, “el pedido de reconocimiento de la crisis presupuestaria en la UNC”, que se plasma en el mantenimiento y presupuesto de las distintas unidades académicas. Por otro lado, “una clara exigencia de que se unifiquen las condiciones de cursada en toda la Universidad”, contemplando regímenes especiales para estudiantes trabajadorxs y personas gestantes, ambas situaciones que generan dificultades en el cursado y deserción. A nivel laboral también denuncian “la falta de reconocimiento de lxs profesorxs adscriptos”. Es decir legalizar un trabajo ad honorem en la mayoría de los casos y en el mejor de los casos, en negro. “Son profesores de tercera categoría, que en casi todas las unidades académicas no reciben ningún tipo de remuneración por su trabajo y nosotros queremos que estos profesores sean reconocidos, que se les pague un sueldo y que pasen a planta”.

Situación similar es la que viven lxs ayudantes alumnxs. Con estas prácticas, explica Aisha, “seguimos perpetuando esta idea y nosotros cuando salimos a buscar trabajo y nos profesionalizamos, claramente es más fácil abusar de nosotros”.

“Otra cosa que es muy grave -continúa la vocera de la Asamblea- en un contexto en el que en dos meses hubo dos casos de gatillo fácil, es la exigencia de blanqueo del convenio que tiene la UNC con la Policía de la Provincia de Córdoba, que es completamente ilegal porque las Universidades Nacionales son territorio fiscal de la Nación y solamente puede actuar la policía federal”.

La infraestructura de algunos edificios, como los de las Facultades de Filosofía,  Artes o Psicología y la situación presupuestaria de las unidades académicas creadas en 2010 y 2016 a partir de procesos de lucha y de toma también forman parte de los reclamos, como detalla: “El caso de Artes y Psicología que en el 2010, gracias a una lucha también de toma muy grande, el Estudiantazo, lograron separarse de la Facultad de Filosofía y hacerse Facultades, siguen recibiendo el mismo presupuesto que cuando eran escuelas (…) La cantidad de alumnos de psicología y artes se triplicó y el presupuesto sigue siendo el mismo, lo que significa que no hay becas para los alumnos inscriptos, que no hay ningún tipo de mantenimiento edilicio y que la situación  se complica cada vez más”. Por su parte, “la Facultad de Sociales que se creó en el 2016 (…) no tiene edificio propio y cursan en toda ciudad universitaria, sin tener un lugar fijo”.

Finalmente, pero no menos grave, Aisha plantea una crítica al sistema de reconocimiento académico avalado por el Rector en la forma de “un paquete de reformas que avanza sobre la creación de un banco de materias en las que cada materia tiene un crédito y vos podes crear tu recorrido académico supuestamente como quieras. El problema es que es altamente antipedagógico, por un lado,  porque no se respeta el recorrido sugerido por los planes de estudio, que tiene una lógica y un sentido que va desde el ciclo básico hacia la profesionalización y, por el otro lado, porque le da más crédito a algunas materias que tienen que ver con ciencia y con técnica que otras que tienen que ver con filosofía, humanidades y artes”.

“Esto -continúa- es sólo una parte, porque después lo que se plantea a largo plazo, en una reforma que se terminaría de perpetrar en el 2030 es que las licenciaturas pasen a durar 3 años, como en el caso de Europa, de EEUU o de Chile. Estas licenciaturas serían gratuitas como lo son ahora, pero después todos los posgrados, masters y doctorados, son pagos en la Universidad. Con una licenciatura de 3 años, sería obligatorio pagar los últimos dos años de la educación superior y eso generaría paulatinamente una mercantilización de la educación muy concreta, se estarían arancelando los últimos dos años de la educación superior. Entonces alertar sobre eso”.

Hoy según plantea la Asamblea de Interfacultades,  se había acordado una  nueva instancia de diálogo con las autoridades universitarias. “Después de mas de una hora y media de espera”, las mismas brillaron por su ausencia.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *