Desde el jueves pasado familiares de víctimas de violencia de género iniciaron la toma de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), ubicada en Ciudad de México, acompañadas por la solidaridad de distintos grupos de feministas.

La ocupación del edificio que según expresan “debería protegerlas” es en señal de protesta por el accionar del Estado mexicano que no da respuesta, apaña la violencia patriarcal y revictimiza a las víctimas y sus familias.

Sobre la medida de fuerzas y las novedades conversamos con una de las protagonistas, Erika, desde la ocupación de la  Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH)



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