En el Enredando las Mañanas del miércoles 19 de octubre, apenas minutos antes de que empezaran las acciones del paro de mujeres contra la violencia machista, en el Enredando las Mañanas compartimos las voces de compañeras de distintos puntos del Abya Yala.
En este caso, Bernarda Pessoa, integrante de la Coordinadora Nacional de Mujeres Rurales e Indígenas (CONAMURI) de Paraguay, compartió algunas impresiones con nosotras acerca de la violencia hacia las mujeres y del reciente 7° Encuentro Nacional de Mujeres Indígenas de la organización, que se realizó el pasado 14 de octubre en la ciudad de Asunción. Bernarda además participó del Encuentro Nacional de Mujeres en Rosario, Argentina, por lo que aun guardaba frescos los recuerdos de esa experiencia compartida.
En relación a la participación en el evento, Pessoa compartía que en el Encuentro de Mujeres Indígenas estuvieron presentes mujeres provenientes de los Pueblos Mbya Guaraní, Ava Guaraní, Guaraní Occidental, Pai Tavytera y Toba Qom. Los temas debatidos, comenta, fueron “el proceso y la estructura de organización y después el informe de dos años de período de mi mandato en CONAMURI. Después se vio el análisis de la coyuntura actual y el análisis de coyuntura anteriormente, cómo las mujeres participan en la labor de la economía, de la economía familiar y el aporte importante de las mujeres en nuestra sociedad”.
Debates que también atravesaron, afirma, las actividades del Encuentro Nacional de Mujeres en Argentina, donde “se habló bastante de eso y en todos los países de Latinoamérica estamos pasando violencia, discriminación. Todo eso se vio en ese encuentro”.
Al respecto, es clave el trabajo que la CONAMURI viene desarrollando al interior de las comunidades, con una labor permanente y receptiva de la realidad que la rodea y de las situaciones que atraviesan las mujeres rurales e indígenas. Bernarda, como mujer indígena, comenta que “se habló mucho sobre la participación nuestra en CONAMURI, porque ha cumplido diecisiete años el pasado 15 de octubre y quince años fueron llevando las riendas las compañeras campesinas y ahora que nos dieron la participación por unanimidad del Congreso, que me eligieron a mí como su representante para las mujeres campesinas y para los pueblos indígenas. Entonces en ese interín yo había propuesto si cómo se ven las cosas, si han mejorado bastante o no y muchas de las compañeras indígenas dijeron que esto tiene que continuar y queremos unificar más las mujeres a nivel Chaco y a nivel Oriental. Y en eso, CONAMURI tiene que ser fuerte en su incidencia política como la participación de las mujeres indígenas y la participación de las mujeres campesinas. Pero en el ámbito político dentro de la estructura es bastante buena y está con muchas actividades, con muchas reuniones, con muchos encuentros, estamos en diferentes campañas, y este mes del 25 de noviembre queremos hacer una marcha”.
El machismo en los territorios
Así califica Bernarda un de los “frentes que enfrentan” y que trabajan con los propios compañeros. Bernarda entiende que es crucial en relación a esto “sobrellevar los acuerdos con los líderes, sobrellevar los acuerdos y la incidencia, en forma igualitaria con las mujeres y hombres, juventud, también entra mucho ahí la niñez. Entonces, sí hablamos mucho de la violencia, es algo muy amplio, porque la violencia y el machismo y la discriminación está en todo, entonces en todo hay que hablar: en la familia, en la organización, en la comunidad, en el trabajo, el compartir, todo se tiene que hablar en eso para que podamos ponernos de acuerdo y salir en eso, porque es muy difícil”.
CONAMURI, y Pessoa en particular, trabaja este tema de manera sistemática. Para Bernarda, el trabajo debe comprometer tanto a mujeres como a hombres, “porque si no participamos todos y todas será un poco muy difícil salir de las dudas y salir del problema, porque es difícil darnos ese gusto de darnos la participación. Pero los hombres también tienen que pensar que las mujeres no ganan sus espacios de regalo. Las mujeres ganan su espacio a través de mucho esfuerzo, de mucha lucha, de mucho debate, de mucha incidencia, entonces por eso nos mantenemos nosotras en el poder. Me gustaría que los hombres les digan a las mujeres que tienen su propio espacio y que compartamos en la idea de ellas. No debatir tanto, no disgustar y eso. Entonces, hasta ahí lo que yo puedo colaborar”.
La resistencia y la lucha por el territorio
Por otro lado, es imposible abordar la situación de las mujeres rurales e indígenas sin atravesarlo con el debate y la reivindicación del territorio, parte insoslayable de su identidad. Al respecto, Bernarda explicaba que los debates “se ampliaron más sobre el tema de territorialidad de pueblos indígenas y también se debatió bastante de cómo la están sufriendo las mujeres”.
Sin ir más lejos, CONAMURI se movilizó por las calles de Asunción junto a otras organizaciones el pasado 11 de octubre “a denunciar sobre lo que pasó en la comunidad Sauce del pueblo Ava Guaraní del departamento de Alto Paraná. Esa comunidad fue desalojada violentamente por un empresario y la orden según el INDI [Instituto Paraguayo del Indígena] fue legalizada y tiene que ser respetada, pero nosotros nunca decimos que el desalojo fue legal, porque las tierras le pertenecen a los pueblos indígenas”.
El conflicto de la comunidad de El Sauce se extiende a los años 70, durante la construcción de la Hidroeléctrica de Itaipu, “fueron desalojadas 36 comunidades indígenas de ahí, hubo matanza al que se resistía y la promesa del estado fue que si funcionaba la represa, poco a poco se iban a comprar las tierras para esas familias desalojadas, para las 36 comunidades”. De esa promesa han pasado cuarenta años ya, y la comunidad, al ver que “este año han pasado ya bastantes años y la promesa nunca se cumplía, entonces decidieron ocupar sus propias tierras”.
El desalojo fue solicitado por Hermann Hut, quien sería consuegro del vicepresidente paraguayo y “amigo personal” del presidente Horacio Cartes y quien afirma ser propietario de una gran extensión de tierras en esa zona; y llevado adelante el pasado 30 de septiembre con personal policial, un ómnibus con agentes del GEO [Grupo Especial de Operaciones], integrantes de la policía montada y el INDI.
Bernarda comenta con firmeza que “entonces nosotros hemos decidido manifestar frente de la fiscalía y frente del (INDI) y al parlamento nos trasladamos también. Eso fue el 11 de octubre pasado. La defensa de nuestros territorios es la fuerza de los pueblos indígenas, porque nosotros nos basamos mucho por la ley 904 de Estatuto de Comunidades Indígenas y el convenio 169 de la OIT, para nosotros es un gran valor, porque esa ley avanza mucho y es una defensa para el pueblo y su territorio. El territorio es una defensa para nosotros los pueblos indígenas. El territorio marca en donde estamos, el territorio marca toda una historia, toda una cultura y por eso nosotros valoramos tanto el territorio así como también en todos los ámbitos de las naciones indígenas. Entonces eso es lo que para nosotros es un territorio”.
Foto: Chaco sin Fronteras