Horas antes de las elecciones, un mensaje oportuno corría freneticamente por WhatsApp, cuyo contenido desesperado titulado “Operación Maldonado”, pretendió y en gran medida logró autosatisfacer a votantes macristas y/o posibles votantes, de la supuesta NO responsabilidad del gobierno en la desaparición y muerte de Santiago Maldonado.
 
Con preguntas muy sencillas fueron respondiendo inequivocamente a las incognitas sembradas desde el poder para deslindarse de culpa y cargo en el caso Maldonado. A cada pregunta la respuesta fue la misma, los responsables absolutos de lo ocurrido se tratan de los Mapuches. Y presentaba como siniestro operadores en un juego de pinzas, a “K” y “Zurdos”.
 
Hace una semana apareció el cuerpo de quien, luego de 72hs se confirmó que era el de Santiago. Desde el momento del hallazgo, los ataques del gobierno mediante sus medios se volvieron mas virulentos y mucho mas mentirosos, la ecuación es simple, llenar de datos falsos y versiones sin fuentes a los medios hegemonicos de comunicación, para embarrar la cancha y poder plantar un relato falaz de lo ocurrido. Para ello apelaron a su mejor caballo de Troya, el grupo Clarin.
 
Pero volvamos a mensaje. Primero afirmaba que los Mapuches habían sido los últimos en ver a Santiago. Si bien es cierto que Santiago corrió junto a los integrantes de la comunidad ante la embestida de Gendarmeria en la Ruta 40 el 1 de agosto, replegándose dentro de las tierras de la comunidad. No existe versión contrapuesta alguna, que no afirme que Gendarmeria ingreso a las tierras y persiguió hasta las orillas del río Chubut a quienes protestaban. Tampoco existe la supuesta desmentida del testigo E ante el Juez Llerar, el cual se habría desdicho de afirmar que Santiago no había cruzado el río y que a las orillas de este fue capturado por Gendarneria y llevado del lugar.
 
Este punto es muy sensible, ya que desde los medios hegemonicos se instaló que Gendarmeria no era responsable y tomaban como dato un supuesto testimonio ante el Juez.
 
La verdad es que el Juez que lleva la causa, salio a desmentir esa versión lanzada desde el sábado pasado, aclarando que ese testigo protegido no ha declarado aún ante él.
 
Lo que dijo E
 
Lo que si ocurrió, es que el testigo E ratifico ante la Comisión Interamericana por los Derechos Humanos (Órgano de la OEA) en su cesión en Montevideo, ratificando que: “al momento que la Gendarmería Nacional ingresó con Santiago, deciden cruzarlo, pero a esa altura del río, tenía una parte profunda, donde la única manera para cruzarlo era a través de un nado de metros. Según el Testimonio E Santiago no sabía nadar, entonces trata de tomarlo para ayudarlo a cruzar el río. Mientras eso sucedía los gendarmes efectuaban disparos contra ellos. La acción de cruzar el río se dificultaba bastante, entonces Santiago le dice al Testimonio E, ‘siga ud peñi, no puedo más, yo me vuelvo’. Entonces ahí el Testimonio E lo suelta. Así Santiago vuelve a la ribera del río y trata de meterse en un arbusto. El Testimonio E refiere que Santiago se encontraba totalmente mojado. La temperatura era muy baja y el agua del río extremadamente fría. Asevera que nunca llegó a cruzar el río”.
“La situación del cruce del río es observada por una decena de gendarmes que se encontraban sobre el alto de la barranca. Tres de ellos bajan hasta el arbusto donde estaba Santiago gritando ‘acá tenemos a uno’, a su vez, el Testimonio E escuchó un escopetazo. El Testimonio E señala que esos tres gendarmes lo arrastran con golpes hasta lo alto de la barranca donde se encontraba el resto de los gendarmes. Asevera que lo suben a una Unimog. Esa fue la última vez que lo vio a Santiago”.
 
La llamada que nunca existió
 
Otras de las mentirosas afirmaciones lanzadas horas antes de las elecciones era que quienes avisaron de la aparición del cuerpo habían sido los Mapuches, a partir de una llamada telefónica, pero el propio Juez desmintió la versión instalada desde los medios hegemomicos al aclarar que jamás se produjo la llamada y que el cuerpo de Santiago fue encontrado por un rastrillaje ordenado por él. “Tampoco recibí ningún dato certero para hacer el rastrillaje. Si hubiese tenido un dato certero no habría puesto en riesgo a los bomberos ni los prefectos, lo habría ido a buscar directamente”, aseveró Lleral de manera contundente en diálogo con PáginaI12”.
 
Territorio prohibido
 
“¿A Quienes hay que pedirles permiso para ingresar al supuesto territorio sagrado mapuche? A los Mapuches”, afirmaba de modo contundente aquel viralizado mensaje. Pero la realidad es exactamente la contraria, ya que el accionar de la justicia y las fuerzas represivas así lo indican.
El testigo E, si estaba dispuesto a declarar ante la justicia y de hecho lo estaba por hacer, ante el anterior de la causa, el Juez Otranto el 18 de septiembre pero justo ese mismo día Otranto suspendió las testimoniales de modo abrupto y coordinó un mega allanamiento sobre las tierras sagradas Mapuches, golpeando a los mapuches y destruyendo sus viviendas. Aquel día Sergio Maldonado se lamento y de modo desesperado salió a denunciar la maniobra del Juez que demostraba no querer avanzar en la investigación y si criminalizar a la comunidad. Tesitura que continua empeñada el gobierno macrista.
 
Desmontar mentiras instaladas mediáticamente no es fácil, pero las mismas no se puede sostener por mucho tiempo, por eso debemos estar atentxs y preparadxs para nuevas escalofriantes versiones-mentiras que buscan tapar la verdad.
 
#JusticiaporSantiago
#SantiagoMaldonado
 
Texto: @JoseComunicando ★